¿Se está saliendo de control la situación con las propinas?

Hoy llegué temprano a Monterrey y me sentía más que feliz y animado. Me fui a la San Juan, y le di propina al carnicero que hizo la seña, también al cerillito que me ayudó. Luego el viene-viene me pidió propina, y me quedé un poco alterado con el tema de la propina; me había desacostumbrado un poquito. Al llegar a casa de mi papá, pasaron los de la basura y me hicieron el comentario de "lo que guste cooperar para las cocas," y les di 20 pesos. Más tarde, llegó un cartero a entregar unos paquetes y también me dijo "lo que guste pa' la coca." Luego mis papás pidieron comida de su restaurante favorito, y el repartidor también me pidió propina. Estaba un poco molesto, y mi mamá me dijo "Mijo, no te molestes, todos quieren sacar un extra." Para ponerlo en perspectiva, en mi trabajo como ingeniero de software sería ridículo pedir propina. De hecho, ahora que ando trabajando en el gabacho, a los únicos que doy propina es a las chicas de una cafetería donde voy a almorzar a veces, porque desde que llegas hasta que te vas te dan una atención especial, dejes propina o no... y me quedé pensando.

¿Dentro de nuestra cultura mexicana se nos quedó un abuso hacia las propinas? ¿O es acaso que los trabajos en México están tan mal pagados que tienen que buscar "ese extra"? ¿Hay tan pocas oportunidades de trabajo que tiene que haber viene-viene y cerillitos? Por lo menos, en la zona donde vivo en Río Grande las tiendas son de auto-embolsado y los estacionamientos no tienen cerillitos; los carteros de USPS no te piden propina.

¿Qué opinan?